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el tren de los momentos

29 octubre, 2006

Viaje al país de Alejandro Chan...



Se lanzaron guiños de complicidad años atrás, y tenían una cita pendiente. EPS invitó al director de cine Julio Medem a un encuentro en Miami con Alejandro Sanz, con ‘Chan’, por su nuevo disco. El músico bajó su escudo y se sinceró

Madrid-Miami son nueve horas justas de avión. Nada más sentarme en la butaca, siento que lo que me separa de Alejandro Sanz es exactamente eso, un océano. Un océano cruzado por la tarde, una alargadísima tarde al día siguiente de haber terminado el montaje de imagen de mi última película, Caótica Ana. ¡Qué alivio!, me siento ligero y voy a volar, acercándome a Alejandro y alejándome de mí, es decir, alejándrome. ¡Me lo he ganado! Tiene gracia que éste sea mi primer día libre, quiero decir tranquilo y satisfecho, después de pasar un año en guardia pendiente de la preparación, el rodaje y el montaje de mi criatura. Ahora sólo falta terminar de vestirla con ropa de abrigo, y protegerla así para siempre. A ella sí que le espera un larguísimo viaje.

Álvaro, mi hermano pequeño, que trabaja conmigo en la productora, me ha dejado su iPod, en el que me ha grabado todo lo de Alejandro Sanz. Yo, que nunca he sido aficionado a escuchar música por los cascos, paso el viaje sumergido en la fuerza emocional de esta bestia que parece al borde de romperse, y yo, por momentos, siento ganas de ponerme de pie. También leo sus letras, que me parecen tremendas, fluyendo a chorros pero precisas, por las que da la cara y el alma, sufriendo, jugando, disfrutando y enloqueciendo con el amor. Es un poeta que pierde sangre en cada estrofa, por eso se le recibe tan bien.

Leo además los textos que acompañan sus discos, críticas, entrevistas… Al principio me he sentido un poco periodista, pero enseguida deduzco que ésa no es mi función. Éste ha de ser un viaje personal, y de placer, hacia un mito de la música mundial. Leo algunas cifras astronómicas sobre Alejandro Sanz. Por ejemplo, que de sus 10 discos editados ha vendido 21 millones de copias, ha obtenido 200 discos de platino y ha recibido 16 premios Grammy.

Reconozco que gran parte de lo que leo no lo conocía; sus temas, sí, claro, pero sólo los más oídos. Siempre he admirado a este artista impulsivo y generoso, pero nunca le había seguido de cerca. Cuando me llamaron de EPS para hacer este trabajo, a petición de Alejandro, pensaban que él y yo éramos buenos amigos. Hace 10 años, Txetxo Bengoetxea –gran amigo común, particularísimo compositor y cantante (entonces del grupo donostiarra 21 Japonesas), a quien ambos seguimos, queremos y admiramos– nos presentó una noche, hablamos media hora, y nunca más nos hemos vuelto a ver. Pero hace dos años, Alejandro Sanz me dedicó su Premio Ondas, por el tema No es lo mismo, a mi documental La pelota vasca. Cuando le entregaron el premio dijo que mi película, para él, que sí la había visto, era una apuesta honesta y necesaria por el diálogo en el País Vasco. Automáticamente, las nubes más crispadas del momento se pusieron encima de su cabeza, y le cayó un chaparrón que tenía mi nombre, así que durante un tiempo lo compartimos. Entonces le agradecí aquella valiente dedicatoria por teléfono. Tener ahora la oportunidad de darle las gracias en persona es uno de los grandes motivos por los que he aceptado hacer este viaje.

A medida que me voy embriagando de Alejandro descubro algunos aspectos más que nos unen. Por ejemplo, que llevamos el mismo tiempo de carrera profesional, 15 años: él sacó en 1991 su primer disco, Viviendo deprisa, y yo, en ese verano, rodé mi ópera prima, Vacas. Desde entonces, Alejandro ha editado seis discos (sin contar con sus reediciones), y yo, seis largometrajes (me refiero a los de ficción). El resto son diferencias; la más notable que ahora se me ocurre es que yo le saco exactamente 10 años de edad.

Las luces del avión se apagan para que podamos dormir, y yo llego al momento culminante del vuelo. Aquí, en mitad del océano, descubro el sentido íntimo de mi viaje hacia Alejandro, el que me hace necesario. Ocurre cuando, después de haber escuchado todos sus temas editados, por riguroso orden cronológico, llego al último. Del disco que saldrá en noviembre con el título El tren de los momentos sólo tengo el single: A la primera persona. ¡Qué barbaridad! Este tema contiene para mí todo lo mejor de Alejandro Sanz. Su abismo es más profundo; su precipicio, más alto; su grito, más angustiado. Una cota más elevada aún que aquel Corazón partío de hace casi diez años, pero manteniendo la misma verdad de chiquillo romántico que parece vivir dentro de un huracán.

Sé que el ‘single’ lleva un mes escu-chándose por todo el mundo, y ya está el primero de la lista en muchos países, pero siento que yo lo estoy estrenando. Me parece que alguien que canta como él A la primera persona ha abierto sus entrañas al aire de todos y nos pide ayuda. Y yo voy camino de su casa. Quiero ser esa primera persona en llegar, la primera persona amiga que le va a brindar cariño, y ánimo. Y estoy preparado, suelto, optimista. Decido entonces que escribiré este reportaje desde mi primera persona a su primera persona, como un viajero que además, antes de llegar a su destino, sabe disfrutar de cada momento del recorrido, como nos invita el texto que presenta su último disco, El tren de los momentos.

Aterrizo en Miami. Aún debo esperar dos días completos antes de encontrarme con Alejandro Sanz. Yo decidí venir antes para disfrutar en solitario del lugar, y enseguida intuyo que esta espera va a hacer el encuentro mucho más emocionante. Paso todo el día siguiente en la playa y me baño varias veces en un mar muy revuelto, pero con el agua a 24 grados.

De vez en cuando miro al horizonte por si aparece Cuba. ¿Está realmente quieta, o día a día se va acercando imperceptiblemente?… ¿Cuántos cubanos de Miami están esperando el momento de tenerla al lado para dar el salto?… ¿Qué pasará con los hijos de la revolución castrista cuando Estados Unidos hinque el diente a su isla en nombre de su democracia?… Se lo preguntaré a Alejandro, que intuyo que vive en algún lugar equidistante entre Fidel y Bush.

Al día siguiente, a las siete de la tarde, un coche me lleva a casa de Alejandro. El destino final se presenta como una gran puerta que se abre por la mitad, un paseo oscuro entre palmeras y, al fondo, una casa que podría ser española, con algún roce árabe. Sale Alejandro Sanz. Nos fundimos en un abrazo.

–¡Gracias por venir!

–De nada, estoy encantado de estar aquí.

Entonces saco una bolsa y le regalo mis seis largometrajes en DVD. Me lo agradece y me invita a dar un paseo en barca por Miami. Camino del embarcadero que hay frente a la casa, vuelvo a abrazar a Alejandro para darle personalmente las gracias por haberme dedicado el Premio Ondas. Me dice que a él le encantó la película. En una deslumbrante lancha de 700 caballos recorremos despacio un canal marino que cruza entre dos islas artificiales, repletas de mansiones en las que viven los ricos y famosos. Es casi de noche y luce una luna llena preciosa. Alejandro la mira y…

–¿Sabes lo que mi madre diría ahora? “¡Mira lo que ha hecho el cielo!”.

Me encanta compartir con él esa luna, y le comento que comenzamos el rodaje de Caótica Ana con luna llena, y cuatro lunas más tarde lo terminamos en Arizona. Y además, hace exactamente un año, el día del eclipse, decidí que Manuela Vellés, de 19 años y sin ninguna experiencia, sería la protagonista de la película, por los cuatro costados. Ahora veo el inmenso trabajo que hemos hecho juntos con un orgullo limpio y tranquilo, sintiendo que aquélla fue una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida.

Al dejar el canal de las islas artificiales, Alejandro aprieta el acelerador –se nota que le gusta– en dirección a la parte financiera de la ciudad. Rascacielos iluminados que surgen al borde del mar, y palmeras, a miles. Nos cruzamos con otras lanchas, pero nadie nos supera.

–Soy el capitán Chan. Todos me llaman Chan, me lo puso Paco de Lucía.

De vuelta en su casa, mientras su tío Paco nos saca cosas de picar a la española, Alejandro me ofrece un puro de los años sesenta; no sabía que se pudiera fumar un puro de hace más de cuarenta años. Nos los fumamos mientras comemos –tampoco había hecho esto nunca– y mientras hablamos.

Conecto la grabadora de periodista, pero le cuento a Alejandro mi idea del viaje en primera persona hacia él. Cuando le digo que he escuchado toda su carrera profesional en el avión, exclama:

–¡No jodas!

Y entro a saco con lo que más me importa.

–Tu single parece el grito desesperado de alguien que sufre.

–Hay mucha gente que piensa en lo más obvio, y es… Bueno, se murió mi padre, la separación… Porque desgraciadamente nuestra vida se convierte en pública y le quita mucha magia… Esta misma canción la escribo hace diez años y nadie hubiera pensado que era personal. Pero sí, es un grito desesperado a muchas cosas… Yo soy creyente porque soy casi andaluz; bueno, no exclusivamente por eso, pero…

–Bueno, pero tú lo asocias. Y eso vale.

–Sí, lo asocio. Y de alguna manera estoy cabreado con Dios, con mi Dios, ¿no?… En el mismo sentido estoy buscándolo. Pero para mí el amor es tan Dios como cualquier barbudo que se precie…

–¿De dónde te ha salido este disco?

–Yo he trabajado de una forma que no he hecho nunca, y es que no he escrito ni una palabra en un papel. Sólo he ido grabando, grabando, grabando música, e improvisando con la voz. Y me iba quedando con las partes que me gustaban, porque a veces de diez minutos de grabación hay dos o tres que han nacido con el sombrero y las botas puestas, y volvía a cantar sobre esas partes e improvisando otra vez… Con lo que llegó un día en que yo escuché una canción como si la estuviera escuchando por primera vez. También por eso resulta que luego, no sé si te pasará a ti, trabajar con músicos que son muy talentosos tiene mucho peligro, porque pueden terminar haciendo su película. Yo por eso, desde el primer momento quería dejar mi meada sobre la pared y marcar el territorio.

–En tus temas hablas mucho del alma, y del fuego que llevas dentro, y se ve que lo tienes. Y se nota que sabes arder.

–Eso es muy bonito. Pues sí, y me viene de mi gente, de la forma de hablar de mi madre, del flamenco… El flamenco es muy cruel.

–¿A qué te refieres?

–Yo con 14 años tocaba la guitarra en un sitio de Madrid para un gitano, y me enseñaron a base de hostias. “¡Quítate la guitarra… Tú tocas para cagarse en tu puta madre!”. Así pasa que luego, el que salga de ahí, ya está preparado para cualquier levante. –Perdóname, yo insisto. ¿Hasta qué punto estás tú en A la primera persona, o es un personaje que has inventado para que sufra por ti?

–¿Y cuánto había de ti en Lucía y el sexo o en Los amantes del Círculo Polar?

–Mucho, pero yo siempre tengo a mano el camuflaje de la ficción, que me permite irme más lejos que en mi realidad. En el caso de Los amantes…, yo de adolescente conocí ese amor loco, pero nunca me ha llevado a tirarme en paracaídas en el Círculo Polar.

–Bueno, porque no tenías los medios.

Nos reímos.

–A mí en el avión me entraron ganas de ser tu hermano mayor, para ayudarte.

–¡Gracias!

–Otra posibilidad es que estés perfectamente bien.

–Yo estoy bien.

Largo silencio en el que fumamos el puro y comemos chorizo picante.

Alejandro interviene:

–El coraje es una buena arma.

–Para tirar para arriba.

–Sí, mira, perder al padre es un momento muy duro, porque hay una especie de desprendimiento. Todavía cuando veo un partido de fútbol miro a mi lado, porque solía verlos con él… Ahora sólo veo el fútbol por nostalgia. Son momentos duros en la vida de una persona, pero yo no quiero ser un llorón. En la vida hay gente que realmente tiene problemas. Lo que me ha pasado a mí es ley de vida en un caso, y en el otro es una decisión que se toma entre dos personas. Hay gente a la que se le muere un hijo en brazos, de hambre. Mis problemas me parecen ridículos al lado de eso. Este mundo está cabrón.

–Sí, pero los problemas de cada uno ocupan dentro un lugar destacado sobre el resto, es ley natural, y tú mismo al cantar estás buscando identificación en el que te escucha.

–Sí, porque al interpretar, que de alguna manera te vuelves un actor, tienes que creértelo, tienes que estar hirviendo.

Ahora soy yo el que busca en él identificación y complicidad, y le cuento que yo viví una situación similar de separación de mi pareja y la muerte de mi padre.

–¿Y con qué edad?

–Con la tuya, hace 10 años.

–¡Joder, cabrón, estamos tocados por…!

Fuma una calada de su puro y comenta que no es tan bueno como esperaba. A mí lo que me extraña es que no esté seco después de tanto tiempo.

–En el escrito que hice para la prensa dije que yo nunca escribo de mí.

Nos mantenemos unos segundos en silencio. Y los dos sonreímos.

–En pequeña confesión, te diré que es una frase que me puse como escudo. Para curarme en salud.

–Si quieres no pongo nada de esto.

–Haz lo que tú quieras, la decisión es tuya. Pero que quede claro que esto nunca más lo haré con nadie.

–Por otro lado, yo no soy un periodista, soy una especie de colega amigo.

–Por eso te quiero decir que estamos en la misma conversación.

–Bueno, pues esto, que sirva para que no te lo pregunten más. Tú tienes un escudo, y es ahora cuando puede hacer más efecto, porque lo has enseñado.

–Sí, yo nunca escribo sobre mí.

Alejandro me invita a subir a su estudio, donde ha pasado encerrado los dos últimos años. Me muestra en su ordenador cómo ha compuesto el disco, cada instrumento, su voz y la premezcla que casi es la mezcla final. Y me pone otros temas, como el que da título al disco. Me llama la atención la variedad y la soltura no sólo musical, sino de humor. Ya está, comprendido: el tren está ahí, lleno de momentos…

Y voy descubriendo que Alejandro, en persona, es muy simpático y divertido. No para, habla muy rápido, y se nota que está disfrutando; eso me encanta. Parece que su coraje funciona de verdad.

Me habla de su hija Manuela, de cinco años, a la que todos los días llama por teléfono para regalarle una palabra nueva, con su significado.

–Versátil, esperanza… Ése es el mejor regalo que le puedo hacer. Otro regalo que le hice hace unos meses fue decirle: “Cuando tú tengas mucho miedo de algo, tú te tienes que reír muy fuerte. Tienes que reírte con más ruido que el susto”. Y ella me decía, asombrada: “¿Sí?”. “Sí, porque el miedo no puede con la risa”. Y se lo demostré con una bruja en unas atracciones.

Yo tomo nota y me siento cada vez más cercano de este español que lleva viviendo aquí casi 15 años.

–Parece que Miami, para alguien como tú, puede ser un paraíso.

–Esto es una maravilla de todo. Y por esta casa pasa mucha gente, músicos de cualquier parte. Veo en Miami a más gente que cuando estoy en Madrid. Aquí hay una mezcla de culturas...

–Y aquí los cubanos, ¿cómo llevan el tema?

–¿De su Cuba?… Pues te diré una cosa: como pasa en muchos lugares en los que los problemas son fundamentalmente políticos… los más jóvenes, e incluso los de mi generación, pasan bastante. Los primeros que llegaron, sus padres, son muy reaccionarios con el régimen de Fidel, pero la segunda generación es más moderada en ese aspecto.

–¿Y tú cómo ves Cuba?

–Yo odio a Fidel [ríe]. Yo soy de centro radical, vamos. Me hace mucha gracia porque Fidel y Bush, en el fondo, son exactamente iguales. Y ya de Chávez, ni hablemos; ése está zumbao.

–¿Qué pasará cuando muera Fidel?… ¿Podemos soñar con una república democrática cubana, sin la injerencia de Estados Unidos?

–Falta mucho para eso, ahora le toca el trono al hermano de Fidel.

–Sí, parece que a Cuba le espera una monarquía absolutista.

Sale otro temazo: España. Cómo en nuestro patio resulta tan fácil, y lícito, manipular, mentir a gritos, desde la prensa del corazón hasta la política.

–Hay periodistas que se ganan la vida así, y si pudieran atracar sin que les pillaran, también lo harían. La justicia en España tendrá un día que poner un límite a la información falsa, tendenciosa. Si no se resuelve pronto este tema, nos pasará factura dentro de unos años, y la historia dirá que en este comienzo del siglo XXI triunfó la mediocridad y la ignorancia.

Sí, personalmente uno a esta vergüenza nacional la inflamación del fútbol, que hasta en los medios públicos ocupa un espacio descomunal. Pregunto a Alejandro si está al corriente de otra reciente enfermedad, me refiero al bulo sobre la conspiración del 11-M.

–El día del atentado, cuando aún no se sabía quién había sido, yo pensé: si ha sido ETA, el PP se la va a deber; pero si no…, se caerán con todo el equipo. Y cuando supieron que había sido Al Qaeda, se pusieron nerviosos… Estaba seguro de que nos iban a mentir.

–Si no hubieran mentido, quizá no habrían perdido las elecciones.

La segunda tarde se hace tranquila, soleada y sin grabadora. Alejandro, a quien le encanta viajar y sentirse parte de cada sitio al que va, me confiesa que él sueña con dar de alta su casa como país: una república independiente, muy gaditana, en la que impera una especie de anarquía, doy fe. En este país de Alejandro Chan vive un ser extraordinario, su tío Paco, que le cocina con primor de madre y que me parece el artífice del renovado coraje de Alejandro, de su peso, y de mantenerle encendida la guasa. Al presenciar cómo hablan tío y sobrino, en estéreo, me siento transportado a ese Cádiz popular de los carnavales, en el que el panadero, por ejemplo, es el que mejor rimas hace en las chirigotas. Alejandro se sabe muchas, y se nota que le inspiran esas letras ingeniosas y descaradas del sur de España. Las canta, muerto de la risa, con pasión y cierta pena de alejado. Y yo, en Miami por unos días, siento un estimulante orgullo de que este artista internacional represente desde su república la cultura andaluza, de la que participo, aunque sólo sea como entregado admirador.

Y damos otra vuelta en lancha, esta vez hasta el mar. Mientras le hago un vídeo pienso que Alejandro está rodeado de primeras personas, que saben cuidarle como nadie, así que mi viaje se acaba. El artista está bien, pues mejor para su arte, y así ganamos todos.

¡Coraje, hermano Chan, yo te sigo!

(Julio Medem, Foto: Nacho Alegre, en la web http://www.elpais.es/ y en El País Semanal del domingo 29 de octubre)

28 octubre, 2006

"En la vida lo más importante es tener coraje"

Pocas personas conocen un éxito tan rotundo como el suyo. Un éxito hecho de estadios con récords de público, de largas listas de premios, de millones de discos vendidos. Al que habrá que añadir, seguro, el que acaba de salir al mercado. Será porque Alejandro, cuando canta –igual que cuando habla–, logra expresar emociones que son de todos.

Estamos en su casa, concretamente en su estudio, al que se accede por unas escaleras exteriores que casi arrancan en el cálido mar al que se asoma Miami. "Me gusta ponerle nombre a las habitaciones. A este estudio lo llamo el cuarto de las palabras, porque cuando vienen mis amigos, me dedican algunas frases", dice. Efectivamente, allí han dejado su huella manuscrita Shakira, Paulina Rubio, Juanes y otros muchos nombres famosos. También hay dibujos suyos colgados de las paredes, pero no como se cuelgan habitualmente los cuadros, sino sujetos con pinzas, como si fuesen ropa tendida. Y un piano de pared. Y sus fotos, supongo que esas que formaron parte de una exposición que hizo, junto a Jaume de Laiguana, a beneficio de Infancia Sin Fronteras. Pienso que ese cuarto es el verdadero refugio de Alejandro, y seguro, la parte de su hogar que más le define. Allí está todo lo que le gusta y le motiva. Instalo mi grabadora y comienzo con la sensación de que voy a hacerle una entrevista a un amigo de toda la vida.

¿Es aquí donde has compuesto 'El tren de los momentos'?
Sí. Aquí es donde he grabado casi todo el disco. Por ejemplo, metía el amplificador de la guitarra en el baño y cubría las paredes de mantas para evitar resonancias en las paredes y en los cristales. Es un disco muy artesano. Pero, sobre todo, es el disco que yo quería hacer.

¿Por qué te has venido a vivir aquí?
Me han echado (ríe), no me dejan vivir. No todo el mundo, claro. Pero hay una cierta maldad implícita en nuestra sociedad mediática difícil de comprender. Y no me importa por mí, yo ya estoy curado de espanto. Pero tengo a mi familia, mi madre, y no me gusta... y si estoy allí, me entero de todo. En cambio aquí, si me llama alguien, digo: “Primero, no quiero saber nada. Segundo, ¿cómo estás?” (risas). Pero también estoy aquí porque me gusta esta casa, me gusta el mar.

Eres un artista muy premiado. ¿Uno se acostumbra al éxito?
Yo cada vez aprecio más los premios. Es como el cariño de una madre: cuando eres joven no echas cuentas, porque uno lo tiene ahí. Pero cuando va pasando el tiempo, te vas haciendo consciente de su importancia. Hay muy buenos artistas que no llegan nunca a triunfar ni a tener un premio. Por otro lado, el artista no es sólo el cantante. En muchas ocasiones hay un equipo de gente que también lo hace muy bien. Sin embargo, yo cambio todos los premios del mundo por la emoción del que escucha mi canción por primera vez y se emociona.

¿Cómo has conseguido llegar hasta el punto donde te encuentras?
En la vida no hay nada más importante que acertar con lo que te gusta y tener coraje para tirar para adelante. Yo he tenido muchas presiones para dejar la música. Mi madre quería que estudiara, hiciera oposiciones y me metiera en un banco con un contrato fijo. Decía: “Pero qué haces. Un artista, ¡Dios mío!”. Ya mi padre lo había sido... pero si tienes coraje para superar esos obstáculos y tienes el don para lo que sea, seguramente te irá bien. En la vida no hay como soñar con algo e ir a por ello al cien por cien. Y yo lo tenía muy claro.

Todos conocemos tu trayectoria. Pero, ¿cuál ha sido la parte dura de tu vida?
Hay bastante parte dura alguna entra tanto dentro de lo personal que no lo voy a mencionar. En cuanto a lo profesional, quizá la primera etapa, hasta que conseguí que me ficharan con Viviendo deprisa, me costó mucho. Me encontré con gente muy buena y también con gente mala, que no sé por qué tiene tendencia a ponerle las cosas difíciles a los demás. Así que un día me colé en el metro, porque no tenía ni para pagarlo, me senté en la puerta de la compañía de discos y dije que de ahí no me iba hasta que me diesen mi carta de libertad, poruq no me dejaban grabar, pero tampoco me dejaban ir. Y les dije: "Y si al mes huelo, que me quemen (risas)". Así que bajaron y me dieron la carta de libertad con la condición de que grabase Pisando fuerte, Viviendo deprisa... todas las canciones del primer disco. Entonces llevé la maqueta a otra compañía y por fin la escuchó Iñigo Zabala, y empecé con negociaciones, y recibí otras ofertas. Y por fin firmé, grabé y empecé a ganar mi primer dinero, y a viajar... y al que me puso las cosas difíciles le envié un ramo de flores. Le dije: "Ojalá tengas en la vida tanta suerte como yo".

Entre todo lo que has conseguido, ¿de qué te siente más orgulloso?
De mi hija. A pesar de todas las circunstancias siempre he tenido el tiempo y la paciencia para poder explicarle las cosas. A veces le doy unas charlas tan largas que ella me dice: "Basta". Y le regalo una palabra todos los días. Le digo: "Hoy te voy a regalar la palabra ilusión". Y se la explico, y ella me hace infinidad de preguntas. Es muy curiosa. En el disco toca el violín en uno de los temas: Si molestan.

Tu infancia fue muy distinta a la suya.
Si situación fue bastante más difícil económicamente. Mi madre nos crió sola, porque mi padre también era artista y viajaba mucho. Pasó un embarazo sola con nosotros dos, y con un cólico nefrítico...

Pero tú admirabas mucho a tu padre...
Sí. Era una cosa extraña. Me parecía tanto a él que a veces hasta me provocaba rechazo. Le quería mucho, per también tenía mis diferencias con él. Supongo que es lógico.

¿Cómo superas su ausencia?
Bueno, no considero que esté ausente. Para mí sigue presente de alguna manera. Los psicólogos me dirían que hay que aceptarlo (ríe). Yo sé que está muerto y eso no puedo cambiarlo, pero hay cierta parte de él que sigue presente. Me provoca vacío cuando estoy viendo un partido de fútbol, parece que le voy a llamar y voy a ir a comentarlo con él, como hacíamos antes. Pero él era muy introvertido, no demostraba mucho sus sentimientos. No llenaba nunca los silencios, con lo cual los silencios se parecen un poco a él.

¿El dinero da la felicidad?
La felicidad no la da el dinero, pero depende también para qué lo utilices. Hay gente a la que le gusta amasar dinero. Muchos de los ricos que he conocido lo son precisamente porque son míseros con su propia familia, con su gente, con ellos mismos. A mí no me gusta contarlo. Claro que, qué cómodo es no tener que preocuparse de él. Pero yo no me considero una persona rica, me considero rico en otros aspectos.

Padres gaditanos, naciste en Madrid, vives en Miami, tu hija es medio mexicana... ¿eso proporciona riqueza o crea confusión?
Los que viajamos mucho atrapamos cosas de aquí y de allá, es el intercambio cultural, y hay quien se pierde esas cosas. Recuerdo cuando vi La pelota vasca, de Medem, que le preguntaba a Eduardo Madina (diputado socialista por el País Vasco): "¿Qué le diriías tú a quien te puso una bomba y te quitó una pierna? Yo le diría que leyera y que viajara. Porque ser vasco es fantástico, pero matar o morir por la tierra... eso es insultar a la tierra, la tierra no pide sangre. Viajar, leer, conocer a otra gente, otras culturas, y sentirte integrado, no dejarte amedrentar por los anclados del mundo.

¿Crees en Dios?
Estoy medio enfadado con él, porque muchas veces no lo entiendo, es un poco cabroncete. No sé si se porta mal o nos deja que nos matemos... no le hablo (ríe). Estoy esperando a ver si me llama.

¿Y aún crees en el género humano?
Sí... mira, hay una canción en este disco que se titutla Donde convergemos y habla de ese punto donde hasta los más radicalmente opuestos tienen algo en común. Ese punto se llama esperanza.

¿Y en la media naranja?
La única media naranja que conozco es ésta -descuelga un papel que hay colgado en la pared: es una foto de una media de color naranja. Ríe-. Esta la mandó un amigo, ¡una foto con mi media naranja! Ahora en serio: creo en la media naranja. Cuando aparezca, la reconoceré.

Muchas de tus canciones hablan de amor, ¿es lo que más te inspira?
Sí, lo que más me provoca para escribir es la búsqueda de ese amor, la terquedad del ser humano en esa búsqueda. Cuando el tiempo nos quita la capacidad de creer, o por lo menos la mina, el hombre sigue creyendo que existe el amor.

Eres una persona no sólo con buen humor, sino con sentido del humor...
Es una forma de ser. A mi hija le he enseñado el poder de la risa. Por ejemmplo, cuando le dan miedo las cosas, le digo: "Te voy a contar un secreto que tenía guardado para cuando tuvieses 18 años, pero te lo voy a adelantar. Cuando algo te dé miedo, tú ríete muy fuerte". "¿Sí? ¿Por qué?" "Porque el miedo no puede con la risa?". Se lo dije en un parque temático, porque le daban miedo unas brujas que venían. Y cuando pasaron empezó: ja, ja, ja, ja...

(Margie Igo, Fotos: Jaume de Laiguana. En la web http://www.psychologies.orange.es/ y Psychologies nº 22)

Desde Buenos Aires...



Andén 14 del tren Roca. Unos 300 invitados copan los históricos vagones con bañeras, camarotes con mueblería antigua, sillones tapizados de cuero y distintas comodidades que acusan el paso del tiempo y por el que pasaron varios presidentes.

El extraño tour que parte de Constitución hacia la estación Ranelagh en la zona sur forma parte del evento especial que el sello Warner montó para acompañar la visita de su artista Alejandro Sanz y promocionar el lanzamiento de su nuevo disco, El tren de los momentos . A bordo de ese "tren de la alegría" se cruzaban medios porteños y también de otros países, como Chile, Colombia, México y hasta El Salvador, que habían llegado especialmente para cubrir la conferencia de prensa del artista español (la única que realizará en América latina) antes del comienzo de su tour, que comenzará en febrero, por toda la región.

Un mozo con cancha en viajes largos servía café y ofrecía empanadas mientras el viejo vagón se movía de un lado a otro como si estuviera en alta mar. Los movileros de los canales de cable se hacían el picnic haciendo esas típicas notas de relleno utilizando la fantasmal geografía de los vagones. Serían los mismos vagones que dos horas más tarde utilizaría, al menos por cien metros, el cantautor español para llegar en tren hasta el costado del predio del Golf Club Ranelagh, donde posaría para las fotos y las cámaras.

Adentro del recinto los periodistas esperaban al cantante –que durante la conferencia de prensa hablaría de la Argentina, sus canciones autobiográficas y desmentiría amores para las revistas del corazón– escuchando las canciones del nuevo CD El tren de los momentos. Las mujeres periodistas parecían nerviosas, inquietas por la inminente presencia del artista pop. El presidente de la compañía Warner, también. Transpiraba cuando le dio el reconocimiento por haber vendido en la Argentina un millón trescientos mil discos.

Sanz, de buenísimo humor, saludó, agradeció y dijo: “Esto que me dicen de mejor artista... vamos a ver qué le dicen a Luis Miguel”. Simpático y sin el cassette habitual de las estrellas, el cantautor español llegó con su décimo disco bajo el brazo, sucesor de No es lo mismo (2003), donde participan Shakira, Alex González (Maná), Juanes, Antonio Carmona (Ketama), el grupo Calle 13, el cubano Lulo Pérez en la producción y su pequeña hija, en el violín: “Ella toca una nota en una canción pero ¡qué nota!”, comentó con el entusiasmo de un padre primerizo.

Grabado en su casa de Miami, donde se recluyó a componer las diez canciones inéditas que integran este álbum, el músico incursiona en el pop, los aires flamencos, el funk, el hip-hop latino y la clásica balada a lo Sanz: “No hablo de mí en mis canciones, aunque ésa es la coraza que me aprendí para defenderme. Pero ya nadie me cree que sea así. De alguna manera no importa demasiado a quién están dedicadas estas canciones, sino qué significan para el que las escucha, porque ahí cualquiera les puede poner su propia historia. Eso es lo que me interesa de las canciones”, dijo en un momento de la charla, cuando lo corrían para saber sobre su vida personal.

Sanz dijo en esta visita a la Argentina que Buenos Aires es una de sus ciudades favoritas y que le gustaría grabar alguna vez con Fito Páez y con Charly García “si es que alguna vez lo pudiera encontrar”. Desmintió amoríos con Shakira y Valeria Gastaldi; recordó cuando escuchó flamenco por primera vez a los 7 años y confesó que canta por necesidad: “Quiero que mis canciones sean clásicas, no exitosas, y soporten el paso del tiempo. Imaginen un tema como «Macarena» en 30 años. Yo prefiero «Imagine»”.

De vuelta al motivo de su disco contó que el título salió en una noche de insomnio. “Quería que el título hablara del concepto de las canciones que para mí tenían que ver con esa visión de un viaje en tren. Las canciones son como los ciclos de la vida, donde algo empieza y algo termina. Me gustó esa idea porque creo que a veces no es tan importante en este viaje el punto de partida ni de llegada sino todo lo que transcurre en el medio.”

(Por Gabriel Plaza, La Nación. En la web http://www.lanacion.com.ar/ )

En los Grammy Latinos...


Los cantantes Shakira, Alejandro Sanz, Juan Luis Guerra y el grupo RBD actuarán en la séptima entrega anual de los premios Grammy Latinos, cuyo elenco de presentadores incluirá a los actores mexicanos Pablo Montero y Ludwika Paleta.

Explicaron que en el evento, previsto para el 2 de noviembre en el Madison Square Garden de Nueva York, actuarán además Willie Colón, Fania All Stars, India, Ismael Miranda, Andy Montañez, Tito Nieves y Gilberto Santa Rosa en el segmento correspondiente a la salsa.Para la gala, que será transmitida en vivo por la cadena Univision, se anunció también la participación de Maná, el Conjunto Primavera, Thalía, Joan Sebastian y Luis Fonsi.

Además participarán Miguel Bosé, Alejandra Barros, Los Horóscopos de Durango, Lena, Adamari López, Catalina Sandino, Alexa Damián, Milly Quezada, Johnny Ventura, Paloma San Basilio, Galilea Montijo y Sofía Vergara. La colombiana Shakira es la máxima nominada, con cinco categorías, seguida por la mexicana Julieta Venegas, con cuatro.

(En la web http://www.elfinanciero.com.mx/ )

Entre los que viajan en tren...




El cantautor español Alejandro Sanz adelantó esta semana su nuevo CD 'El tren de los momentos”, que tendrá su lanzamiento planetario el 7 de noviembre próximo, en una pintoresca conferencia de prensa ofrecida en un campo de golf de la localidad bonaerense de Ranelagh, a la que los invitados llegaron tras viajar en un restaurado tren antiguo desde la estación de Constitución.

La exótica y lujosa reunión sirvió, además, para que la filial local de la discográfica multinacional por la que Sanz publica sus álbumes, lo distinga por haber superado el millón de copias vendidas en la Argentina. En una rueda de prensa a la que asistieron unos 300 periodistas, el español indicó que su inminente placa se denomina 'El tren de los momentos' porque “me gusta rendirle homenaje a lo romántico que tiene el viajar en tren”. “Entre los que viajan en tren -argumentó- se crea una complicidad enorme que hace que la gente le cuente a su ocasional compañero de travesía cosas que no comparte ni con su familia”.

El título del volumen, que no responde a ninguna de las canciones que lo integran, significa, según detalló “que cada tema es una estación, un momento para cada persona”. El repertorio de una decena de piezas propias tiene un corte de difusión, 'A la primera persona', que anda sonando en radios y cuyo video, donde participa la actriz Paz Vega que brilló en el filme 'Lucía y el sexo', se aprecia en los canales de cable.

En el cancionero se cuenta un seguro hit veraniego que responde al nombre de 'Te lo agradezco pero no' donde Sanz vuelve a unirse a la colombiana Shakira. En la canción en cuestión, Sanz recrea la exitosa fórmula que mixtura congas y bronces de son cubano con guitarras flamencas y que explotó con 'Corazón partío', uno de los temas esenciales en sus 15 años de carrera. El encuentro artístico con Shakira -del que se grabó el correspondiente clip en Nueva York que sigue en la línea de 'A la primera persona'- se estructura tras un pegadizo estribillo que repite 'Te lo agradezco pero no' y Sanz no quiso revelar si oculta otro tipo de relaciones con la artista latinoamericana. Con elegancia y simpatía pero sin soltar prenda alguna, desistió referirse a Shakira y también al romance que actualmente lo une con la argentina y ex Bandana Valeria Gastaldi.

“Yo usé como escudo el decir que no hablo de mí en las canciones, pero ya nadie me cree”, se lamentó en otro tramo de la charla. A modo de reflexión íntima, que sirvió de explicación a tanta insistencia sobre asuntos referidos a su corazón, comentó que el éxito “me ha servido para poder hacer música que es lo que más me gusta, pero tiene de malo la exposición pública que no deja vivir en paz”.

Lo que sí contó al respecto de su vínculo con Shakira y con el también colombiano Juanes, que toca la guitarra en otros temas de 'El tren de los momentos', es que “estamos armando una fundación para los niños pobres de América Latina para que esa problemática tenga una voz en los organismos internacionales”.

Otros temas que se destacan en el cd son el flamenco-pop 'Se lo dices tú', la balada 'En la planta de tus pies' y el funky con aire reggaeton 'La peleíta' en que se suma René Pérez, del grupo portorriqueño de reggaeton Calle 13. Pese a esos laderos que enmarcan una estética que impera en el universo romántico, Sanz aseveró: “Aprendí a cantar escuchando a Camarón de la Isla y por eso no armo las frases como lo hace un intérprete pop” y en su Olimpo de influencias también incluyó a Paco de Lucía, a The Beatles y a Leonard Cohen.

Consultado acerca de referentes argentinos, citó a los rockeros Charly García, Fito Páez y Andrés Calamaro, pero también recordó que de una trunca velada de grabación para el disco 'Honestidad brutal' del ex Abuelos de la Nada, “salí algo escaldado”. En relación con su vínculo con la Argentina, confesó que es parte del “club de fans de Buenos Aires” que, dijo, comparte con sus paisanos, los músicos Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina y los actores Imanol Arias y Eusebio Poncela.

El paso por esta ciudad será aperitivo de una gira latinoamericana que a partir de febrero comenzará en Perú y que aún no tiene fechas confirmadas para las presentaciones en Chile y en la Argentina. En ese repaso por referencias geográficas, apuntó que actualmente está radicado en la ciudad estadounidense de Miami “porque me gusta el mar. Pero estar allí no me hace sentir norteamericano y, de hecho, uno puede irse a Miami para aprender a hablar en inglés”.

"El secreto de mi éxito Alejandro Sanz no dejará nunca de inclinarse frente a las estampitas de Camarón de la Isla y Paco de Lucía." Hace bien. Son dos nombres llenos de milagro que de un modo muy particular otorgan una pátina de prestigio y misticismo a la carrera de Sanz...

(En la web http://www.rionegro.com.ar/)

Las historias del tren 'El Expreso'...


Respecto de su nuevo disco, Sanz dijo que “hay buen ambiente, porque está siendo recibido muy bien, se ha colocado en los primeros lugares en todos los países.” Y agregó: “Gran parte de la producción esta grabada en mi casa, porque es de la única manera de que realmente puedas controlar todo lo que pase, sino se debe trabajar el doble”.

Sobre la temática del álbum, explicó: “Me gustaban las historias que había en el tren 'El Expreso', que era el que tomaba cuando era chico. Siempre me interesaron las historias que se creaban en los compartimientos. Había una especie de complicidad que se generaba entre la gente”.

Pero Sanz también habló de su carrera: “Yo tenía un profesor que decía que todo en esta carrera es un 90 % de esfuerzo y un 10 % de talento, pero he puesto mucho esfuerzo en este disco y todo mi talento también”.

(En la web http://www.infobae.com/ )

En los trenes de las ciudades multiculturales...


En los trenes de las ciudades multicuturales, como Nueva York, entran y salen con rapidez personas diferentes. En cada estación el choque cultural es evidente. Precisamente, esa idea de la multiculturalidad se vierte en la séptima entrega discográfica del cantautor español Alejandro Sanz, titulada 'El tren de los momentos'.

Para la voz de 'Corazón partío' cada canción representa una estación distinta por los sonidos que le dan forma musical. De plano, no las etiqueta como fusión –palabra de moda entre los cantantes para encasillar sus temas en un género– porque simplemente sus composiciones han absorbido sus influencias musicales, que oscilan desde sus raíces flamencas hasta los sonidos latinoamericanos.

"Es como un viaje desde el corazón hasta el oído, sabiendo dónde subir y bajarse. Este disco marca un paso evolutivo en mi carrera, además que tengo la bendición de contar con compañeros talentosos", comentó Alejandro Sanz en referencia a las colaboraciones de Juanes, Antonio Carmona, Álex González (Maná), Shakira y el dueto puertorriqueño Calle 13.

Alejandro Sanz se siente "menos mala persona", bromea, al "descubrir" la riqueza de las colaboraciones musicales con sus colegas. Aunque el artista había realizado duetos, en sus discos acostumbra a acaparar todos los temas con su voz ronca. "Se dieron espontáneas y naturales. Con Shakira siempre es un placer (ambos se unieron en 'La tortura') y Juanes y Álex pasaron por mi estudio y el resultado fue puro", expresó en entrevista telefónica con Primera Hora. "A Calle 13 los conocí porque trabajo con boricuas y me encantó. Admiro a Vico C, a Tego Calderón y a Calle 13 porque creo que los tres son pilares fundamentales del arte urbano en Puerto Rico. Hablamos y encajó muy bien", mencionó en torno al tema 'La peleíta', donde aparecen Juanes, en calidad de músico, y Calle 13 con su toque urbano.

Alejandro se puso el sombrero de músico, productor, intérprete y compositor en 'El tren de los momentos'. Literalmente, cubrió todas las bases. ¿Ventaja o desventaja? "A nivel creativo tiene todas las ventajas: economizas tiempo, no dependes de la gente, no das explicaciones. Con otras personas se alarga el proceso. Además, sólo te das la oportunidad de arriesgarte sin miedo. La desventaja es que a veces no consigues cien por ciento la calidad del sonido, pero eso es recuperable a la hora de la mezcla de sonido. Lo importante es no sacrificar el corazón, el feeling", reaccionó. Alejandro Sanz sólo tiene una preocupación: "la mirada de mi hija ante el curso del mundo". Antes de dar puntillazos sociales y políticos en sus composiciones, el cantante prefiere abonar felicidad en el rostro de su hija Manuela, producto de su relación con la modelo mexicana Jaydy Mitchel. "Estoy enfocado en mi hija y en las opciones que tendrá en este mundo. Quiero gastar mis energías en eso y en fundaciones como ALAS para ayudar a los niños de Latinoamérica. Un grupo de artistas estamos tratando de salvarlos del infierno en el que los criamos y dejamos", señaló quien formó parte de la exposición fotográfica 'Fotos de ida y vuelta' para colaborar con Infancia Sin Fronteras de Guatemala.

Alejandro Sanz lanzará el 7 de noviembre 'El tren de los momentos', pero su sencillo 'A la primera persona' ya se escucha por las ondas radiales. Sobre si existe ya "esa persona", después
de su separación, dijo que "no hay espacio para eso, no la he encontrado". La actriz española Paz Vega ('El otro lado de la cama', 'Spanglish') acompaña al cantautor español en el vídeo de su primer sencillo 'A la primera persona'. La dirección de la secuencia estuvo a cargo del catalán Jaume de Laiguana, quien colaboró en tres vídeos del último disco inédito del artista 'No es lo mismo'.

Una vez más, Alejandro Sanz está nominado a los premios Grammy Latino 2006 en el encasillado de canción del año por el tema 'La tortura', que interpreta junto a Shakira. El artista pisará suelo boricua la segunda semana de noviembre para promover su disco y compartir con sus seguidores en un in store.

(En la web http://www.primerahora.com/ )

25 octubre, 2006

Save the children... Reescribamos el futuro


Hace tiempo que las guerras no entienden de edades. En el paisaje sanguinolento de cualquier conflicto los niños son protagonistas sin ningún pudor humano. Para unos se trata de daños colaterales, para otros un infanticidio. Angola (1988), Bosnia (1993), Albania (1997), Irak (2003) y hace un mes Líbano. En ese periodo, dos millones de menores fueron asesinados, seis más resultaron heridos y 20 millones quedaron desplazados, según la ONU. Y para los que sobreviven el futuro es igual de incierto: el miedo les acecha y la escuela, la esperanza, les abandona.

Según la carta fundacional de Naciones Unidas todo niño tiene el derecho de ir a la escuela. Pero la realidad a la que no hace mención dicho texto es que 115 millones de menores no reciben educación alguna, esto es, el 18% de la población mundial en edad de enseñanza primaria. De esa cuota de discriminados, al menos 43 millones, es decir, uno de cada tres, vive en países afectados por conflictos, según revela un informe de Save the Children.

Para paliar esta arbitrariedad, la comunidad internacional se comprometió a conseguir la escolarización de todos los niños hasta el año 2015 como parte de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Pero a ocho años vista, incluso manteniendo los compromisos actuales, este objetivo es una quimera, sobre todo para los niños de la guerra, como así confirmó recientemente la propia ONU. También la ONG hace sus números. Un mapa de los 30 países en conflicto en la actualidad revela que en el año 2004 recibieron en ayudas para educación el 30% del presupuesto total frente al 70% destinado a los estados con rentas bajas pero sin guerras internas. Es decir, la ONU prefiere destinar sus fondos para mejorar la frágil estructura educativa en el segundo escenario que a generar escuelas en el primero.

“La razón: prioridad política y efectividad financiera”, asegura un experto en educación. Y es que sólo el 2% de la ayuda humanitaria asignada a los países frágiles va destinada a ese fin. Recursos necesarios Save the Children, que nació al albor de la Primera Guerra Mundial, cuantifica no obstante en 10.000 millones de dólares anuales el dinero que debe invertir la comunidad internacional si quiere proporcionar educación primaria para todos y cumplir con los Objetivos del Milenio, de los que unos 5.800 deberían destinarse a los países en guerra (Colombia, Sierra Leona, Nigeria, Costa de Marfil, Congo, Angola, Sudán, Irak o Afganistán, entre otros). Con esta meta en el horizonte, la organización presidida en España por José Miguel Contreras (consejero delegado de La Sexta) presentó este martes en Madrid la campaña internacional ‘Reescribamos el futuro’, cuyo “ambicioso” objetivo se centra en la escolarización de tres de los 43 millones de niños de la guerra hasta el año 2010 y mejorar la calidad de la educación de otros cinco millones.

Para ello, la ONG presente en decenas de países hizo un llamamiento a líderes y organizaciones internacionales, gobiernos nacionales y a entidades particulares para lograr este fin. Además, ha puesto su página web para más información (www.savethechildren.es), un número telefónico (902013224) y ha contado con la imagen de actores, músicos y escritores (Antonio Banderas, Susan Sarandon, José Saramago, Ainhoa Arteta, Emma Suárez, Serrat, Federico Mayor Zaragoza, Penélope Cruz, Alejandro Sanz, Rigoberta Menchu, Carmen Posadas, etc.) para acercar la campaña a la calle. En 2010 se verá si este esfuerzo no es en balde.


(“Reescribamos el futuro”. COLPISA, Mateo Balín, en la web http://www.colpisa.com/ )

Con material inédito... y en inglés


Durante el presente año, muchos fueron los rumores que apuntaban a que Alejandro Sanz podría incluir algunas composiciones en inglés en su inminente nuevo disco. Sin embargo, el madrileño parece habérselo pensado mejor y quiere incluir un margen de tiempo entre la edición de El tren de los momentos, previsto para el 7 de noviembre, y un álbum en inglés que tendrá listo para 2007.

Así mismo lo ha confirmado el propio solista durante la promoción de su elepé en Latinoamérica en declaraciones recogidas por Notimex: "Ahora mismo estoy componiendo para el disco en inglés que vamos a lanzar el próximo año y ya lo llevo muy avanzado. Tenía planeado sacarlo junto con éste pero llegué a la conclusión que no sería bueno ni para el disco en español ni para el de inglés, porque la gente podía confundirse".

Alejandro Sanz se lanzaría así a la conquista del mercado internacional en la lengua de Shakespeare y es de esperar que para la ocasión se rodee de buenos amigos como ya ha hecho con El tren de los momentos para el que ha contado con Shakira, Juanes, Antonio Carmona, Calle 13 y Álex González (batería de Maná).

El cantautor aseguró además en su visita promocional que en A la primera persona "he incluido unos pequeños toques de trompeta como pequeño homenaje a México", país al que asegura sentirse muy ligado puesto que su ex pareja Jaydy Michel es mexicana. Incluso llegó a alegrarse de que el grupo local Pesado vaya a grabar una versión de su nuevo single.

Y aún más contento se mostró al anunciar que la gira de presentación de El tren de los momentos arrancará en febrero de 2007 y recorrerá toda España y América. Allí presentará los nuevos temas en los que confiesta haber trabajado "prácticamente durante dos años. He pretendido que sea un trabajo honesto, que tuviera alma y corazón, y que fuera directo al oído de quien lo va a escuchar".

Sanz explicó además que "perseguí cada canción desde el principio hasta el final pero de manera espontánea e improvisada. No quise adornar nada, es esa fuerza que viene del flamenco de la que me nutrí cuando empecé mi carrera y de la música latinoamericana que he ido conociendo".

Pese a que ha ganado numerosos premios y ha vendido millones de discos, el madrileño sentencia que "mi responsabilidad no es lograr buenas ventas, sino hacer un buen trabajo y quedamos muy satisfechos con el material. He tratado de no escribir sobre mis experiencias pues prefiero que la gente termine de componerlas al interpretarlas a su manera".

Toda una declaración de intenciones similar al significado de su enigmático título: "Es el viaje de mi vida. Me parece que la gente que viaja en un tren tiene una especie de complicidad, y en el tren me da la sensación de que hay historias. El viaje no es el punto A y B, sino lo que hay en medio, la gente que conoces, los lugares que ves".

(Por Nacho Herrero/Agencias. En la web http://www.los40.com/ )

Coincidiendo con el lanzamiento de A la primera persona, nuevo single del cantante, la discográfica Warner pone en circulación los seis primeros álbumes de estudio de Alejandro Sanz en ediciones especiales. Se publican en formato digipack y cada uno de ellos contiene temas extra y un DVD adicional.

Justo cuando Alejandro Sanz se dispone a lanzar sus nuevas canciones, su discográfica de toda la vida ha querido hacer balance de la obra del cantante madrileño, reeditando sus discos con el añadido de rarezas, inéditos, videoclps y demás material audiovisual. Viviendo deprisa (1991), Si tú me miras (1993), 3 (1995), Más (1997), El alma al aire (2000) y No es lo mismo (2003) reaparecen de este modo en un nuevo formato que hará las delicias de los fans más comletistas.

En la web http://www.los40.com/ )

ALAS para los niños de Latinoamérica...



Alejandro Sanz, Shakira y Maná,junto a otros artistas de talla internacional, crearon una fundación en Panamá destinada a la lucha contra la pobreza en América Latina.

La fundación se denomina América Latina en Acción Solidaria (ALAS) y su anuncio oficial se realizará en diciembre próximo con la presencia de varios de sus fundadores, reveló Shakira a medios de prensa estadunienses.

La cantante colombiana adelantó que la fundación busca atender más específicamente los problemas de la infancia y sobre todo impulsar la educación en la región. Shakira ya creó la Fundación Pies Descalzos en Colombia para apoyar a la niñez desfavorecida, mientras el grupo mexicano Maná mantiene su compromiso con el medio ambiente a través de su fundación Selva Negra y su continuo apoyo a otras causas sociales.

(En la web http://www.milenio.com/)

El cantautor español Alejandro Sanz anunció en Buenos Aires la creación de una fundación con otros artistas con el fin de ayudar a los niños más necesitados de Latinoamérica. Sanz llegó hoy a Buenos Aires para la presentación de su nuevo disco, 'El tren de los momentos', que será lanzado el 7 de noviembre. "Ahora estoy organizando la creación de una fundación para los niños de Latinoamérica. Estamos conversando con muchos artistas la creación", dijo el intérprete de 'No es lo mismo'.

El cantante evitó dar más detalles porque se trata de un proyecto "muy personal", comentaron a sus allegados. Sanz, quien recibió una distinción por vender más de 1,7 millones de placas por parte de su compañía discográfica, dio un adelanto de lo que será su nuevo álbum, que cuenta con 10 canciones, entre las que participan los colombianos Shakira y Juanes, y Alex, el baterista del grupo mexicano Maná. "Haber grabado con Juanes y Shakira es algo muy especial. Son dos muy buenos amigos y músicos. Me gusta grabar con ellos porque los colombianos han sabido conservar sus raíces", conjeturó Sanz.

'El tren de los momentos' está integrado por 10 canciones, entre las que se encuentran 'A la primera persona', 'Se lo dices tú', 'Enséñame tus manos', 'La peleíta' y 'Te lo agradezco, pero no', estas dos últimas con la participación de Juanes y Shakira, respectivamente.

Sanz llegó a Buenos Aires para hacer una presentación anticipada a la prensa, a la que hizo escuchar seis canciones y ver el video promocional del álbum. El español, que regresa a la capital argentina después de tres años, anunció que su gira por Latinoamérica comenzará en febrero en Perú. Consultado sobre su posible participación en el festival de Viña del Mar, aseguró que lo ve "poco probable" a raíz de compromisos que tiene ya programados.

(En la web http://www.lasegunda.com/)

Desde su estudio, 'El Coraje'...


Alejandro Sanz adelantó en sus declaraciones el ingrediente especial de su nueva obra: el coraje. Así se llama su nuevo centro de operaciones, «El coraje estudio», su guarida frente al mar en Miami de donde han salido los diez sencillos que componen este esperado nuevo álbum.

«Ha sido un proceso distinto a los anteriores. En esta ocasión no hubo nada escrito. Todo el trabajo lo tenía en la cabeza y desde la improvisación creé un patrón musical rítmico», afirma en entrevista telefónica desde su estudio.

Fue un poco un «yo me lo guiso, yo me lo como» porque, una vez más a la búsqueda de la honestidad personal que caracteriza la música del madrileño, Sanz lo quiso controlar todo. Para ello se rodeó de ordenadores y se aisló de todo en su estudio durante año y medio para dejar que salieran de él temas como 'A la primera persona', su primer sencillo, 'Se molestan', 'Se lo dices tú' o 'La peleíta', entre otros de los vagones musicales de este tren.

«Me aislé de todo menos de mi niña, de la que nunca me puedo olvidar», asegura este padrazo en referencia a su Manuela. La sangre andaluza que hay en sus venas le hace así de exagerado porque también abrió sus puertas a esos amigos con los que comparte la pasión musical. Gente como Bebo Valdés, Juan Luis Guerra, Juanes, Shakira, «amigos con los que comparto música y con algunos aprovecho para que me dejen un poquito de su talento».

Esta picardía amistosa se escucha en ese 'Te lo agradezco pero no' que grabó con la cantante colombiana que también aparece a su lado en el segundo de los vídeos musicales que ha grabado en Nueva York.

O en la guitarra de Juanes, con quien participó en Los Angeles en el concierto contra las minas antipersonales y al que luego enganchó para que tocara unos acordes en su nuevo álbum, ya los dos de regreso en Miami donde ambos residen la mayor parte del tiempo.

Hasta Manuela, de 5 años y su única hija con la modelo mexicana Jaydy Mitchel y que está aprendiendo violín y piano, participa en el tema 'Se molestan'.

Esos son los elementos de este 'Tren de los momentos' pero para Sanz la meta es ofrecer a su público un álbum nuevo, una colección de música «un pasito siempre por delante de lo que va a pasar».

«Soy bastante peleón en ese aspecto y me gusta superar cada disco que hago», resume.
De ahí su decisión de aislarse y frente al mar, («y distingo muy bien entre el mar y la playa», aclara el poeta), dar lo mejor de sí.

«Si no vigilas el proceso, se va perdiendo un poco de ti en cada paso», afirma este purista que nunca afina su voz.

Además, en la soledad de su estudio haciendo a la vez de músico, ingeniero de sonido, arreglista y productor, Sanz afirma que no sólo controló más su nueva obra sino que fue mejor para su creatividad. «Así, solo, no hay miedo que valga a la hora de arriesgar», dice.

Después de año y medio para «parir» el nuevo álbum es cuando los suyos le dicen que hay que ponerse a trabajar para darlo a conocer en una nueva gira mundial. «También lo presentaré a la prensa en España pero lo haré en directo y más que me pregunten las cosas que me quieren preguntar prefiero cantarles y así se callan», vuelve a decir con picardía y muerto de la risa por su planeada maldad.

Su deseo es que su música se deje escuchar y que cada uno saque sus conclusiones porque, a pesar de lo mucho que hay suyo en 'El tren de los momentos', Sanz insiste que nunca escribe sobre sí mismo. «Lo cierto es que el que escucha también compone y para eso están las canciones, para que cada uno le ponga el paisaje que quiere, donde quiere y con los nombres que quiere», resume el intérprete.

(En la web http://pan.starmedia.com/)

Y en el cuarto de las palabras...


Sobre la mesa de la sala se encuentran unas fotografías con su hija Manuela y otra con su padre, don Jesús. Desde el ventanal, se ve su querido bote al que ha rebautizado con el nombre de Taranta (antes se llamaba Bulería, pero la asociación con el tema de Bisbal lo orilló a cambiarlo). Estamos en casa de Alejandro Sanz, en donde el cantautor nos recibe para hablarnos de su nueva producción titulada 'El Tren de los Momentos'. Su minimalista propiedad está en reconstrucción. Hay gente trabajando en la edificación de su nuevo estudio, 'Coraje'. Y es justo así como se percibe Álex, desde su cálido saludo, como un hombre que con determinación se reconstruyó a pesar de las trampas de la vida, y que se exorcizó a través de 10 temas a los que bien vale la pena darle una atenta sesión de escucha.

Un vagón en reversa
En la primera escuchada, 'El Tren de los Momentos' se percibe como el disco musicalmente más experimental de Alejandro. Hay tambores, trompetas, algo de bolero, un poco de latin jazz, pareciera que el madrileño tuviera una gran necesidad de salirse de su propio esquema. Curiosamente, las canciones de esta producción -a diferencia de sus discos anteriores-, han sido las menos 'pedigüeñas'. "No les dí todo lo que pidieron, las castigué un poco", dice con su característica sonrisa "los arreglos de este disco son mucho menos que en los demás. Lo que sí es que, si tú pones por un lado el bajo, por otro la guitarra y por otro el piano, cada uno está haciendo su propia melodía, cada uno tiene su propio papel y podrían estar sonando solos"."Y eso es lo que he buscado, no llenar los arreglos de una masa de sonidos que no te permitan que haya aire, que no haya respiración o que no haya silencio. El silencio para la música es muy importante, y hasta que no aprende uno eso, uno crea bloques que hacen que sea imposible que uno se acerque a la canción".

El que "El Tren de los Momentos" sea más facil de accesar que sus últimas producciones, quizá responde también a que este 'tren' fue compuesto de la manera menos ortodoxa posible... en reversa. Primero la música, después las palabras."Bueno, realmente hice algo mucho más complejo que eso, no escribí ni una sola palabra. Sólo improvisé sobre una base rítmica que yo mismo creé. Una base en un bajo y baterías programadas, y sobre eso improvisé con pianos y guitarras. Me puse a trabajar en las letras al mismo tiempo que creaba la música. "Entonces, de esa forma, las frases encajan en la música y salen perfectas, porque no tienes que pasarlas en un papel, adornarlas y luego devolverlas a la canción. Fue un proceso mucho más complicado y sobre todo, tienes que estar en un proceso de inspiración bueno".

¿Es un disco que viene totalmente de la inspiración, o también tienes la disciplina de 'hoy tengo que sacar esta canción y ni modo'...?
"Mi disciplina es que puedo trabajar 14 a 16 horas diarias. No tengo ningún problema con eso. Mi disciplina es que hasta que la canción no me emociona, no paro. Lo que digan las letras tiene que ser verdad. No puedo mentir, porque si me miento, me crece la nariz".

A todos nos pasan tristezas en la vida, y muchas veces los seguidores de un artista ignoramos u olvidamos que ellos, como nosotros, no están exentos del dolor. Alejandro recientemente perdió a su padre y atravesó por un divorcio. Evidentemente, la lírica de este 'tren' sale del bagaje de un hombre que no se puede desconectar de sus vivencias, pero para él, lo importante es que el escucha componga su propia versión de sus canciones.

"Obviamente me han pasado cosas. Es decir, no puedes escribir si no te ha pasado nada. Si no me pasara nada puedo escribir canciones simples, bailables, apretadito... ... yo creo que lo importante es lo que tú decías al principio, que cada uno termine de componer las canciones. El que escucha también compone. No creo que sea importante lo que uno vivió, sino para qué le sirven las canciones al que escucha. Si se fijan en la historia de quien la escribió, entonces dejan de cumplir su función ¿no? Yo no escucharía una canción para saber qué le dolió a éste o al otro. Es como dicen en México, 'al que le quede el chalequito, que se lo quede'".

Bajo la trillada frase de que cada disco es un hijo, éste, tu décimo hijo sin contar a Manuela, ¿qué tanto lo quieres y cómo fue el parto? "No hay adjetivo que valga, ja, ja, macho, es decir, fue muy doloroso escoger 10 canciones de 25 que un principio tenía. De ahí tuve que escoger 15, y de ahí 10. Y cuando ya me pidieron que escogiera el primer single, entonces sí dije, 'no puedo más'. De hecho creo que existe algo de injusticia en eso. Este disco está compuesto bajo una forma, es decir el título envuelve a los 10 temas, termina de contar la historia, es un concepto".

Retomando el título, El Tren de los Momentos, ¿en dónde se encuentra tu tren ahorita, en qué estación estás?" Pues apenas estamos cargando el equipaje y los pasajeros. Va hacia todos lados y vamos a pasar por todos lados. Por donde quiera que haya una vía, por ahí voy a pasar".

De los pasajeros qué invitaste a este tren... Shakira, Juanes, Calle 13, ¿hay alguna admiración específica hacia ellos? "Ellos no son pasajeros, son los maquinistas. Y Shakira es la dueña del tren, ja, ja. Hay mucho agradecimiento, admiración hacia su trabajo, su manera de trabajar, su música y a su persona. Y les tengo mucho cariño. El amor musical es algo muy bonito, el amor artístico, la hermandad artística. Eso le da un sentido a todo. Compartimos artistas la misma idea sin tener que preguntarnos cuántas líneas canta aquél o qué cantante canta qué".

Cuando miras hacia atrás y escuchas 'Viviendo de Prisa', ¿lo ves como al patito feo de la familia? "No, para nada. Más que nada porque para el patito feo, los feos eran los demás. Yo creo que en ese momento hice el mejor disco que podía hacer. Fíjate que si lo escuchas nuevamente, te darás cuenta que hay algo ahí diferente. La persona que me firmó para Warner, que ha sido la persona que más ha confiado en mí, y probablemente en la que más confío de la industria, él lo vio: él vio éso. Escuchó las maquetas que estaban grabadas con guitarra y voz, saturadas y con un sonido malísimo. Pero vio éso: el corazón... la verdad y como te decía, la verdad... la respiro".

5 preguntas tontas con Alejandro Sanz

1) ¿Cuál es tu lado naco?
"Ja, ja... ¿tiene qué ser rápido? Me gusta Laura de América...". Eso me lo van a censurar..." Yo lo sé, ja, ja, bueno pues también Casos de Familia, es tan naco, ja, ja".

2) ¿Cuál es tu mala palabra favorita?
" Chin... tu ma...".

3) ¿Con qué personaje de los Simpsons te identificas?
"Con el padre, con Homero, porque en el fondo va más allá de su casa, es el tipo más incomprendido de la serie, todo mundo 'ja, ja, ja, ja', pero... la procesión va por dentro".

4) Confiesa qué telenovela o culebrón viste...
"Ahí sí que ni una. Nunca me he enganchado con ninguna. Pero de series de TV... Alias".

5) ¿Qué discos le has agregado a tu iPod?
"Le agregué uno que me encantó y que recuperé hace poco de Leonard Cohen, que se llama Ten New Songs, es buenísimo".

Ahora que decías lo de Homero, en una canción de tu disco que se llama 'En la Planta de los Pies', hay una frase que me gustó mucho que dice "ya te habrás dado cuenta que yo no hago cosas normales"... ¿qué es lo anormal de Alejandro?
"Bueno, ¿qué es lo anormal en los demás no?, No lo que pasa es que no me gusta.. no llevo una vida convencional, no me gustan los horarios, las oficinas, me gusta que se aparezcan en mi casa, despertarme a las 3 am... ponerme a pintar, luego irme a bañar y escribir una canción".

En el 'cuarto de las palabras', al terminar el tiempo concedido por la disquera para platicar con Álex, las cámaras se apagan, pero él nos invita a descubrir su cuarto. "Te quiero mostrar algo", dice, a pesar de que todavía hay varios en fila esperando platicar con él. Detrás de su casa, una escalera nos lleva a su cuarto sagrado. "Este es el salón de las palabras, aquí es donde me inspiro para componer". Es un cuarto repleto de fotografías de su hija Manuela, de dibujos hechos por ella, y en todas sus paredes, autógrafos y dedicatorias de todos los que han compartido momentos en la casa de Álex: desde Shakira y Gustavo Cerati, hasta Julieta Venegas, Miguel Bosé y recientemente su tocayo de Maná, que también participa en el disco. Es el espacio más íntimo de su casa. Ahí, tiene una fotografía en la que se encuentra con el legendario Prince. "Me lo presentó tu paisana Salma, ¿cómo ves?", dice con orgullo. Extiende la mano y da un cálido apretón. "Gracias por recibirnos en tu casa, Álex"... "El placer es mío", concluye.

(En el 'tren' con Sanz... Cara a cara, en su casa. Ernesto A. Sánchez, en la web http://www.univision.com/

12 octubre, 2006

cómo se hizo...




en directo...

A la primera persona en directo... Puedes ver la actuación completa en la mtv en este enlace:

http://www.youtube.com/watch?v=NE4p3t6JtbA